Pausas y ritmo en la lengua oral. Didáctica de la pronunciación. Rebollo, L. In Moreno Fernández, F., Gil Bürmann, M., & Alonso, K., editors, El español como lengua extranjera: del pasado al futuro. Actas del VIII Congreso Internacional de la Asociación para la Enseñanza del Español como Lengua Extranjera. Alcalá de Henares, 17-20 de septiembre de 1997, pages 667–676, Alcalá de Henares, 1997. Servicio de Publicaciones de la Universidad de Alcalá.
Pausas y ritmo en la lengua oral. Didáctica de la pronunciación [pdf]Paper  abstract   bibtex   
La autora analiza las pausas y silencios de las conversaciones en telediarios de cadenas españoles e hispanoamericanos de televisión, con el objetivo de sistematizar los recursos que se pueden utilizar para alargar el tiempo de la enunciación, sin que ello afecte a la comunicación. Para comenzar, afirma que las pausas y silencios son elementos constitutivos del ritmo en el lenguaje oral. Seguidamente, presenta los resultados de un análisis fonético experimental de declaraciones emitidas en telediarios. Señala que los enunciados se han segmentados en grupos rítmicos, según la detección de parámetros físicos de ruptura. Acto seguido, explica que los sonidos de apoyo son los elementos vocálicos o consonánticos alargados que, junto a las palabras clave, constituyen estrategias rítmicas para disminuir la velocidad del habla. Añade que los sonidos de apoyo dependen de las tendencias rítmicas generales y de los hábitos articulatorios de cada lengua. A continuación, analiza las declaraciones y comprueba que los fonemas /e/, /a/, /o/ e /i/ prolongan los finales de grupos rítmicos y pueden ser alargados hasta siete u ocho veces más que una vocal acentuada. Destaca que lo significante para determinar cuál es el sonido de apoyo más característico del español es la frecuencia de aparición de estos fonemas. Añade que el fonema /e/ es el sonido de apoyo más frecuente y expone los resultados de la distribución de este fonema y los otros mencionados. Por otro lado, comenta que, a pesar de que el alargamiento de consonantes sea menos frecuente, las consonantes /l/, /n/, y /m/ han sido los sonidos de apoyo en el 16 % de los casos. Señala que las palabras claves también se utilizan para ganar tiempo y reorganizar el discurso, como por ejemplo «bueno»,«este» y «pues». A continuación, afirma que para hablar bien una lengua extranjera es necesario cambiar los hábitos articulatorios de la lengua materna y la consecuencia es un cambio de timbre vocálico. Por esta razón, es importante insistir en la clase sobre los puntos naturales de descanso de la lengua. Concluye que el aprendizaje de estas estrategias permite la organización discursiva y una mejor pronunciación de la lengua.

Downloads: 0